(Residencia Creación )
L'animal a l'esquena (Celrà)
Del 12/10/2020 al 17/10/2020
Ayara Hernández
Cada obra que hago empieza (o continua) por el deseo de trabajar en algo que está latente y empuja por salir. El proceso se arma con un grupo de gente de una manera muy intuitiva, haciendo muchas pruebas que a veces parecen no llegar a nada, las grandes ideas aparecen y caen, suceden las crisis y los hallazgos, llega la materia. En determinado momento aparecen las decisiones que moldearán la obra, se hace el duelo de lo que queda afuera y se festeja lo que queda adentro (en ese momento es donde la obra como tal, toma sus propias decisiones y responde a sus propias necesidades, se vuelve de alguna manera un ser independiente a nosotrxs). Cuando la obra se estrena llegan lxs colegas, el público y se abre el diálogo, y empezamos a entender qué es eso que se hizo, que está ahí vivo. La “nueva” creación que quiero hacer, surge de algunas inquietudes que aún están presentes y vivas de mis piezas anteriores: “En la sombra de un elefante” y “Retrato de un monstruo”.
Ayara Hernández
Para la residencia en L’animal me gustaría trabajar en una versión de un posible solo de mi última obra “En la sombra de un elefante”. El punto de partida para este trabajo es usar el dispositivo escénico de esta obra y algunas imágenes y consignas de “Retrato de un monstruo”. La idea es tomar algunas escenas de estas obras y ahondar en ellas (siguiendo mi intuición de que hay algo en ellas que me interesa seguir investigando). En estas obras una de las operaciones centrales era estar haciendo al menos dos cosas al mismo tiempo, viendo que se producía en la fricción entre estas dos o más acciones.
L'animal a l'esquena (Celrà)
Del 12/10/2020 al 17/10/2020
Ayara Hernández
Cada obra que hago empieza (o continua) por el deseo de trabajar en algo que está latente y empuja por salir. El proceso se arma con un grupo de gente de una manera muy intuitiva, haciendo muchas pruebas que a veces parecen no llegar a nada, las grandes ideas aparecen y caen, suceden las crisis y los hallazgos, llega la materia. En determinado momento aparecen las decisiones que moldearán la obra, se hace el duelo de lo que queda afuera y se festeja lo que queda adentro (en ese momento es donde la obra como tal, toma sus propias decisiones y responde a sus propias necesidades, se vuelve de alguna manera un ser independiente a nosotrxs). Cuando la obra se estrena llegan lxs colegas, el público y se abre el diálogo, y empezamos a entender qué es eso que se hizo, que está ahí vivo. La “nueva” creación que quiero hacer, surge de algunas inquietudes que aún están presentes y vivas de mis piezas anteriores: “En la sombra de un elefante” y “Retrato de un monstruo”.
Ayara Hernández
Para la residencia en L’animal me gustaría trabajar en una versión de un posible solo de mi última obra “En la sombra de un elefante”. El punto de partida para este trabajo es usar el dispositivo escénico de esta obra y algunas imágenes y consignas de “Retrato de un monstruo”. La idea es tomar algunas escenas de estas obras y ahondar en ellas (siguiendo mi intuición de que hay algo en ellas que me interesa seguir investigando). En estas obras una de las operaciones centrales era estar haciendo al menos dos cosas al mismo tiempo, viendo que se producía en la fricción entre estas dos o más acciones.